ya, pero yo opino…

liexpre
¿Quién sería el idiota que propaló la máxima de que todas las opiniones son respetables? Eso es falso. Son respetables siempre las personas, pero sus ideas pueden ser criticadas, rebatidas e incluso refutadas. Es más, en una sociedad moderna e ilustrada, criticar las opiniones de los demás es un sacramento fundamental sin el cual la cultura se estanca y la convivencia degenera por acabar siendo zarandeada por los prejuicios dominantes.

visto en  Per Ardua ad Astra (via Mikimoss, en un comentario a un artículo del Gran Wyoming, vía Halón Disparado).

religion vs libertad expresion

¿Son todas las opiniones igualmente respetables? Paula Cantero
Hablando de la manera que ahora está de moda en política y sociedad parece que la respuesta ha de ser que sí, que todas las opiniones merecen el mismo respeto. Bastaría con apelar a la libertad de cada uno o, concretando un poco más, a la libertad de expresión. Todo el mundo tiene el derecho a decir lo que piensa y lo que diga es digno de respeto. Esta es la sociedad actual; nos movemos en un mundo en el que la crítica se convierte en algo negativo en la mayoría de los casos, en la que parece que lo único que se puede hacer es escuchar lo que cada uno quiera decir y dar uno su opinión, pero sin el ánimo de influir en el otro, pues, al fin y al cabo, su parecer es igualmente válido; se puede discutir, pero sabiendo que ambos criterios están en la misma línea en cuanto mejor y peor, ya que realmente no hay un «mejor» ni un «peor» si todo es del mismo modo respetable. Quien no acepte estos principios, quien no respete todas las opiniones es tachado de intolerante, de dogmático y, en resumidas cuentas, se convierte en una persona con la que no merece la pena hablar ni discutir.
Me parece que en este planteamiento hay un error, y es que se parte de que si no se respeta la opinión de alguien no se le está respetando como persona. (…)
Ahora, ¿son todas las opiniones igualmente respetables? Me parece que no. (…) Que una persona influyente piense que lo mejor para acabar con las desgracias de los países menos ricos es poner una bomba atómica para acabar con su sufrimiento es una opinión. Si respetamos esa opinión estamos diciendo que no nos parece ni bien ni mal, que es una opción como otra cualquiera y que merece la pena tenerla en consideración. Y creo que claramente se ve que es una opinión criticable en todos los aspectos (a quien no le convenza este ejemplo puede poner otro que le convenza más). Entonces, si decimos que es respetable, ¿por qué vamos a impedir que la lleve a cabo? (…)

Por eso, me reafirmo en mi juicio de que no todas las opiniones merecen el mismo respeto. Y, si se dice que todas son respetables porque todas son pensadas por alguien y nadie puede decir que piensa mejor que otro porque entonces es un prepotente, creo que se está cayendo en un absurdo (…). Claro que hay gente que piensa mejor que otra y opiniones más respetables que otras y admitirlo no indica pedantería ni prepotencia, sino realismo, dejando de caer en tabús y eufemismos absurdos.
«La opinión es como una cagada: cada uno tiene la suya, y sólo huele mal la de los demás»
Wardog, defendiéndose de gente con tiempo libre.

Más info :

Un artículo de Fernando Savater

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